Las manifestantes han coreado su reivindicación de “Convenio ya. Más permisos, más salario, más ratio por usuario”, y han interpelado directamente al propietario de la residencia Don Quijote, el Grupo Amavir, que es uno de los grandes del sector, con 43 residencias de mayores en España, cinco de ellas en CLM.
“Por su peso específico en el sector, el Grupo Amavir tiene un representante en la parte patronal de la mesa de negociación del convenio colectivo. Tiene, por tanto, responsabilidad en el bloqueo que sufre la negociación y tiene también capacidad para impulsar un cambio de actitud en las patronales y para reorientar el posicionamiento empresarial. CCOO le exige que la ejerza”, señaló Sara Macías, responsable de CCOO-FSS en Ciudad Real.
El sindicato ya se concentró la semana pasada en Valdepeñas ante la residencia ‘Monteval’, del grupo Domus Vi, otro de los líderes del sector de Atención a la Dependencia con más de 200 centros en España, “y otro de los que deciden lo que hacen o no hacen la patronales, porque las patronales son ellos mismos.”
“Las patronales deben volver a la mesa de negociación y asumir su obligación de negociar un convenio colectivo digno para un sector esencial. Miles de personas, casi todas mujeres, que trabajan en las residencias privadas de mayores, llevan tres años con el convenio caducado y toda una década con los salarios prácticamente congelados. Unos salarios que no llegan a mil euros en la mayoría de los casos”
“Les ha tocado además afrontar la pandemia en primera línea de fuego y en el peor de los frentes. Y después de los aplausos y de las palmaditas en la espalda, no reciben nada, ni de sus patronales, ni de sus empresas ni de las administraciones públicas, que son las titulares y responsables de la Atención a la Dependencia”



























