Engaña el marcador final, 64 a 66. Pues el Cabezuelo Club Baloncesto Socuéllamos no ha hecho un buen partido en la tarde del sábado 23 de septiembre en la final de la Copa Diputación. Fue a remolque del Daimiel hasta los dos últimos minutos y no supo gestionar las últimas posesiones que le podrían haber dado la victoria y revalidar así el título provincial.
Buen ambiente en el Pabellón Roberto Parra para ver un clásico del baloncesto ciudadrealeño, Cabezuelo Club Baloncesto Socuéllamos y Autocares Rodríguez Club Baloncesto Daimiel. Dos viejos conocidos que este año militan en categorías distintas por la renuncia del club presidido por Javier Irnán a jugar en Liga EBA.
Los trofeos los entregaron la vicepresidenta de la Diputación de Ciudad Real, María Jesús Pelayo y la alcaldesa de Socuéllamos, Conchi Arenas, también estuvieron en la entrega de las copas el primer teniente de alcalde, José Luis Romero del Hombrebueno, y la edil de Turismo, Alba López.
Partido
Tras unos primeros diez minutos igualados que terminaron con 15 a 13 para los locales, el CBS se desconectó del partido en el segundo cuarto brindándole en bandeja al Daimiel la victoria.
Una horrible selección de tiro y un paupérrimo porcentaje de canastas dio la opción a los visitantes de distanciarse poco a poco en el marcador.
Pasados tres minutos el Daimiel ya estaba siete arriba. Los jugadores azulones conforme pasaban los minutos tenían el brazo más encogido, fruto del nerviosismo y la precipitación, mientras la muñeca de los daimieleños no fallaba.
A unos segundos del final del segundo cuarto el CBS perdía de veinte puntos, 21 a 41. Un marcador que maquilló Fox con un triple dejando el final 24 a 41. Nueve puntos del CBS en un pésimo segundo cuarto por 28 de Autocares Rodríguez.
Tras el descanso, y la segura reprimenda de Galarreta en el vestuario, el equipo socuellamino salió más concentrado y en dos minutos redujo la diferencia hasta un 33 a 44. Pero fue un espejismo, tras dos triples fallados de los locales los daimileños volvieron poco a poco a distanciarse hasta entrar en el último minuto con 18 de diferencia, 42 a 60. El marcador final en el tercer cuarto fue de 45 a 60, con un parcial de 21 a 19.
Se iniciaban los decisivos últimos diez minutos con la sensación de que era imposible remontar, pues los visitantes se mostraban más acertados de cara al aro. Los minutos pasaban y la dinámica era la misma, el Daimiel obligaba al Cabezuelo a tiros límite y la ventaja aunque algo más corta seguía dando la copa a los blancos. A falta de dos minutos el marcador reflejaba un 58 a 65.
Pero en esos dos minutos el partido se volvió loco. Varias pérdidas de balón del Daimiel metió al Cabezuelo en el partido. El público despertó y los gritos de “sí se puede” se oyeron por primera vez esta temporada en el “Roberto Parra”.
A falta de 40 segundos el resultado era 64 a 65. Alberto Ruiz de Galarreta arengaba a la grada, los jugadores se lo creían, y la victoria era posible después de casi 30 minutos perdiendo.
Pero no se supo gestionar las últimas posesiones. El Daimiel aguantó la última embestida de un CBS que una vez más no estuvo acertado en el tiro. Ellos metieron un tiro libre y el marcador final fue 64 a 66.
Ruiz de Galarreta tiene aún mucho trabajo que hacer con una plantilla que hoy mismo daba a conocer dos nuevas incorporaciones: la del norteamericano Trevaughn Xavier Goodman y la del albaceteño Álvaro Navarro. El equipo está en plena conjunción, aún se está armando, y pese a que la cimentación aún es débil el maestro albañil riojano seguro construirá un bloque firme y guerrero a semejanza de su entrenador. /