La primera victoria local de la temporada para el Kiele llegó en una noche que, pese a disputarse entre semana, rebosó ambiente de gran cita. El Gran Gaby presentó un público más encendido incluso que en un sábado habitual: cánticos constantes, tambores y una entrega absoluta que empujó al equipo hacia un triunfo especial ante el Arenal Emevé. El partido tenía además un componente emocional añadido: el regreso de dos exjugadoras muy queridas por la afición socuellamina, la colocadora María Barrasa y la histórica Amelia Portero, figura clave en las cuatro temporadas que disputó en dos etapas diferentes.
El encuentro ofreció voleibol de altura desde el inicio. La tercera manga, por ejemplo, mostró a una Wanda Banguero desatada, autora de cinco de los siete primeros puntos del conjunto socuellamino. Ese arranque fulgurante disparó la energía en la grada, que parecía querer borrar cualquier recuerdo del tropiezo ante Melilla. La experiencia de Renata Benedito resultó determinante para mantener el pulso del set, aunque el conjunto lucense llegó a igualar a 15. Pero la brasileña decidió sentenciar: tres acciones consecutivas de una contundencia impecable volvieron a inclinar la balanza del lado local, sellando el set y dejando el choque muy encarrilado para las de la Patria del Vino.
Antes de ese desenlace, el segundo set había dejado una de las jugadas de la noche. Con el marcador igualado y el Emevé apretando, volvió a emerger la figura de Wanda Banguero, que encadenó varios remates en salto. El punto del 15-12 fue puro espectáculo: una defensa in extremis a ras de pista, la devolución rápida de una compañera y un remate final que encontró el hueco perfecto. A partir de ahí, las socuellaminas ampliaron la ventaja hasta los cinco tantos (21-16). Las gallegas, cada vez más tensas, no lograron frenar el empuje local. Linda Costa, atenta sobre la red y muy incisiva en varias acciones, terminó cerrando el segundo parcial.
El duelo había comenzado con un primer set igualado, en el que ambos equipos impusieron músculo en la red y dejaron claro que sería un encuentro decidido desde las alturas. Denia, muy inspirada en los minutos iniciales, transformaba en punto casi cada remate. Ese equilibrio se mantuvo hasta el 2-2, pero tras el pequeño descanso el Kiele tomó el control. Una brillante Renata Benedito, muy precisa en los momentos clave, y una Galiano especialmente lúcida en la colocación —colocando balones que las lucenses tenían serias dificultades para leer— permitieron a las socuellaminas despegarse hasta el 20-15. La combinación de acierto propio y errores no forzados del conjunto gallego terminó por entregar el primer set a las locales.
Con esta victoria, el Kiele vuelve a mirar hacia arriba en la clasificación y ya piensa en su próximo compromiso. Este sábado, a las 18:00 horas, recibirá en Socuéllamos al pentacampeón liguero CV Emalsa Gran Canaria, uno de los rivales más exigentes de toda la categoría.
