13 de Noviembre, mes dedicado a la oración por las santas del Purgatorio. Jueves de la XXXII Semana del Tiempo Ordinario.
Hoy hemos de felicitar a los que se llaman: Diego, Abón, Bricio, Calixto, Dalmacio, Himerio, Homóbono, Leoniano, Luis, Maxelendis, Mitrio, Nicolás y Quinciano.
Salmo
Tu palabra, Señor, es eterna
Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Lucas (17,20-25):
En aquel tiempo, a unos fariseos que le preguntaban cuándo iba a llegar el reino de Dios, Jesús les contestó: «El reino de Dios no vendrá espectacularmente, ni anunciarán que está aquí o está allí; porque mirad, el reino de Dios está dentro de vosotros.»
Dijo a sus discípulos: «Llegará un tiempo en que desearéis vivir un día con el Hijo del hombre, y no podréis. Si os dicen que está aquí o está allí no os vayáis detrás. Como el fulgor del relámpago brilla de un horizonte a otro, así será el Hijo del hombre en su día. Pero antes tiene que padecer mucho y ser reprobado por esta generación.»
Palabra del Señor
San Diego de Alcalá, religioso de la Orden de los Hermanos Menores, que se distinguió tanto en las islas Canarias como en la iglesia de Santa María de Araceli, en Roma, por su humildad y caridad en el cuidado de los enfermos. (s. V).
San Abón de Fleury abad en las Vascongadas francesas, admirablemente preparado en las Sagradas Escrituras y en las letras humanas, murió asesinado de una lanzada por defender la disciplina monástica y fomentar denodadamente la paz. (s. XI).
San Bricio de Tours obispo, discípulo y sucesor de san Martín. (s. V).
San Calixto Caravario y san Luis Versiglia, mártires salesianos misioneros en Li Tau Tseu, a orillas del río Lin Chou en China. (s. XX).
San Dalmacio de Rodez obispo, destacó por su caridad con los pobres tal y como lo expresó san Gregorio de Tours. (s. VI).
San Himerio de Susingen eremita, de la actual Suiza, que predicó el Evangelio en aquella región. (s. VII).
San Homobono, (etimológicamente quiere decir hombre bueno) era un comerciante de Lombardía que se hizo famoso por su caridad hacia los pobres, por acoger y educar a niños abandonados y por poner paz en las familias. (s. XII).
San Leoniano de Vienne abad, que llevado a esta ciudad cautivo desde Panonia por gente enemiga, rigió muy santamente a monjes y monjas durante más de cuarenta años, primero en Autún y después en Vienne (s. VI).
Santa Maxelendis de Cambrai virgen y mártir, al elegir a Cristo como su esposo y rechazar al individuo a quien sus padres la habían prometido, éste la mató con su espada. (s. VII).
San Mitrio de Aix-en-Provence, siervo de condición, la santidad le hizo libre. (s. IV).
San Nicolás I papa, que sobresalió por su energía apostólica al reafirmar la autoridad del Romano Pontífice en toda la Iglesia. (s. IX).
San Quinciano de Auvernia obispo, que primero ocupó la sede de Rodez, pero después, exiliado por los godos, fue nombrado obispo de los auvernios. (s. VI).


























